A lo largo de estos últimos años y, con el objetivo de empoderar a las mujeres, han surgido a nivel internacional y también nacional diversos programas que se encargan de visibilizar y fomentar la presencia femenina en distintos sectores y campos.
Una de estas iniciativas es el Programa STEM Talent Girl, un proyecto de mentorización para el desarrollo del talento y el fomento de vocaciones en mujeres en el sector STEM (siglas que hacen referencias a las disciplinas científicas-tecnológicas: Science, Technology, Engineering and Mathematics). El Programa STEM Talent Girl nació en Burgos en el año 2016 de la mano de la Asti Talent & Tech Foundation, gracias al impulso de liderazgo de Verónica Pascual, CEO de Asti Tech Group, quien vio la necesidad de diseñar un proyecto que empoderase a las mujeres, dada la importante brecha de género existente en el ámbito STEM.
La misión de STEM Talent Girl se resume en tres palabras clave: inspirar, educar y empoderar. El proyecto quiere que la próxima generación de mujeres adopte estos valores y se vea empoderada para liderar equipos en el sector de la ciencia y la tecnología. Para ello, el programa tiene tres objetivos, como explica Roberto Ranz, director de Asti Talent & Tech Foundation: “El primero es poder identificar el talento de estas niñas a edades tempranas, desde 3º de ESO; además, organizar una gran comunidad de mentoras a nivel nacional e internacional que posibilite relaciones de mentoring, coaching y acompañamiento; y por último, crear un ecosistema de desarrollo de talento femenino que involucre tanto al sector público como al privado”.
Cómo funciona STEM Talent Girl
STEM Talent Girl cuenta con tres programas específicos: Science for her, Mentor woman y Real Works, que aportan a las chicas que participan en el programa una formación completa y una visión amplia tanto del aspecto académico como del laboral del sector STEM.
En primer lugar, Science for her, dirigido a chicas de 3º y 4º de ESO. En él, las alumnas realizan un proceso de talent search para que tanto ellas como sus familias estén informadas de sus capacidades. Después, participan en sesiones de shadowing junto a mentoras que les enseñan la realidad de su jornada laboral, para que conozcan de primera mano un entorno real de trabajo. “En GSK Aranda nos hemos organizado conjuntamente las sesiones de shadowing entre varias mentoras con el fin de hacer la experiencia de las alumnas más enriquecedora. Poder ver cómo mujeres STEM con perfiles similares trabajan de la mano desempeñando roles muy distintos, permite a las alumnas tener una mejor visión de los distintos tipos de trabajos que existen en la planta de fabricación” cuenta Marta Alonso, mentora del programa en GSK Aranda.
Por su parte, Laura Castro, mentora en GSK Aranda explica: “En las sesiones aprovechamos para hablar. Yo les conté lo que hacía en mi puesto de trabajo, mi experiencia personal y profesional, y también cuáles eran mis inquietudes cuando tenía su edad, que muchas veces son las mismas que tienen ellas”.
En segundo lugar, Mentor woman, que reúne mensualmente a estudiantes de Bachillerato junto a las mentoras en sesiones de mentoring para realizar un proyecto conjunto de investigación con el que aproximarse por primera vez a la metodología científica y que las chicas puedan ver los resultados científicos junto a su mentora.
La tercera parte del programa es Real Works: un programa específico para alumnas universitarias recién graduadas, a través del cual desde STEM Talent Girl se ofrecen planes de becas y prácticas a alumnas con talento en compañías de primer nivel.
La importancia del programa
La baja tasa de incorporación de mujeres en los grados universitarios de ciencia y tecnología es un hecho. “El sector tecnológico y científico es el que más está sufriendo la brecha de género en lo que es el déficit de talento”, asegura Roberto Ranz. “En España se ha identificado la necesidad de mayor talento femenino en este sector. Vemos con preocupación que la mujer quede fuera de la cuarta revolución industrial y procesos de transformación digital”. Por ello y para que las mujeres tomen el liderazgo y la consciencia del valor del talento femenino, es muy importante la organización de programas como STEM Talent Girl.
Tras tres años organizando el proyecto y gracias a estudios de impacto, “el balance es muy positivo. Los resultados nos indican que aproximadamente el 90% de las alumnas que llevamos están ya matriculándose en grados, optativas e/o itinerarios formativos que las dirigen hacia carreras STEM”, avala Roberto Ranz.
Diseñando ya el futuro del programa, los organizadores prevén cubrir la franja norte y el arco Mediterráneo de España hasta estar presentes en todas las comunidades autónomas del país, todo ello en un periodo de dos años. A nivel internacional, se ha dado el primer salto a Francia, pero el programa quiere ser todavía más ambicioso: “Estamos preparando una plataforma que va a dar soporte al mentoring en formato online para que alumnas de cualquier entorno puedan tener acceso”, apunta Roberto Ranz.
Sin duda, se trata de una iniciativa muy enriquecedora a nivel profesional, pero también social. “Con esta iniciativa espero que las niñas tengan la confianza y la seguridad de que una mujer puede ser una experta en el ámbito STEM, y que pueden influenciar a otras mujeres. Porque cualquiera es perfectamente válida, de hecho nosotras lo somos”, augura Marta Alonso.