En el lupus, el tiempo cuenta
El sistema inmune es quien nos protege ante cualquier infección que nuestro organismo recibe. Aun así, existen casos en los que ese mismo sistema inmune funciona de una manera incorrecta y, en lugar de generar anticuerpos para defendernos, pasa a producir anticuerpos que atacan los tejidos sanos, las células y los órganos como el cerebro, el corazón o los riñones. Es el caso del Lupus Eritematoso Sistémico (LES), la forma más grave y común del lupus, una enfermedad autoinmune que es crónica, incurable, poco frecuente y silenciosa, cuya sintomatología puede pasar inadvertida hasta que nos encontremos en una fase avanzada de la enfermedad.