Gracias a una colaboración única con North West e-Health (NEWH), la Universidad de Manchester, la Salford Royal NHS Foundation Trust, el Hospital Universitario de South Manchester (UHSM), el Servicio Nacional de Salud (NHS) de Salford y NICE; GSK logró la implicación de más de 70 centros de atención primaria, más de 130 farmacéuticos comunitarios de Salford, Trafford y South Manchester y más de 3.000 profesionales formados para participar en el SLS, desbloqueando así un nuevo enfoque para el desarrollo de ensayos clínicos.
Asimismo, el sofisticado sistema médico de registro de Salford permite obtener información de los historiales clínicos conectados entre hospitales y centros de atención primaria, lo que hace posible que los profesionales sanitarios puedan realizar un seguimiento en tiempo real de los pacientes con una interferencia mínima en sus vidas cotidianas. De este modo, durante doce meses los pacientes con diagnóstico de asma en Salford reciben una atención médica y farmacéutica sin alterar su rutina, proceso muy distinto al de los ensayos clínicos tradicionales, los cuales se llevan a cabo en condiciones estrictamente controladas con visitas planificadas con mucha frecuencia.
La importancia de innovar en los métodos tradicionales
Como adelantábamos al principio del post, los ensayos clínicos tradicionales están centrados en comprobar la eficacia de un fármaco y la seguridad del mismo. Así pues, se llevan a cabo con pacientes que han sido seleccionados de acuerdo a criterios muy restrictivos y que deben seguir las indicaciones del tratamiento según lo prescrito. Por lo que, la experiencia está estrictamente controlada para que así la recopilación de datos permita hacer comparaciones rápidas con otros ensayos de eficacia.
En cambio, el diseño innovador del Estudio Salford nos permite conocer la efectividad del medicamento comparado con otros tratamientos habituales ya que su metodología de trabajo se basa en medir el impacto del tratamiento en condiciones próximas a la práctica clínica habitual. ¿A qué nos referimos? A diferencia de los métodos tradicionales, el ensayo SLS incluye a una muestra heterogénea de pacientes mucho más representativos de la población que acude a las consultas habitualmente, sin excluirlos por tener otras enfermedades, como por ejemplo la obesidad, considerada la principal comorbilidad asociada al asma, ni los hábitos cotidianos del paciente, como el tabaquismo. En total se contó con un amplio espectro de pacientes, 2.802 pacientes de EPOC y en el caso del estudio en asma participaron 4.233 pacientes.