A mediados de 1985 se iniciaron los ensayos clínicos en humanos para evaluar la seguridad del tratamiento y, a principios de 1986, se inició un ensayo clínico más amplio para evaluar la eficacia y la seguridad en comparación con el placebo. En septiembre de 1986, una junta de supervisión independiente detuvo el ensayo y recomendó que todos los pacientes recibieran el fármaco tras comprobar que 16 pacientes del grupo del placebo habían fallecido, mientras que sólo 1del grupo que había recibido el tratamiento lo había hecho.
La rapidez con la que el tratamiento pasó de ser un medicamento en fase de investigación a un medicamento aprobado habla de la dedicación de las numerosas personas implicadas: investigadores, agencias reguladoras, personas que viven con el VIH y sus familias. La presentación reglamentaria completa a la FDA se hizo en diciembre de 1986 y el medicamento fue aprobado como tratamiento para el VIH en marzo de 1987.
El impacto para los pacientes fue enorme, recuerda Marty: "No era una cura y hoy estamos mucho mejor. Pero fue el primero y dio esperanza a la gente".
La lucha contra el VIH continúa
Casi cuatro décadas después, en GSK seguimos trabajando para encontrar nuevas formas de tratar y prevenir el VIH a través de ViiV Healthcare, compañía global especializada en el VIH que es propiedad mayoritaria de GSK, con Pfizer Inc. y Shionogi Limited como accionistas. ViiV Healthcare nació de una asociación entre GSK y Pfizer en 2009, a la que se unió Shionogi en 2012 tras una larga colaboración con GSK en el desarrollo conjunto de varios nuevos inhibidores de la integrasa, un familia de fármacos antirretrovirales que ayuda a detener la replicación del VIH.
Desde entonces, los científicos de ViiV Healthcare se han esforzado por encontrar nuevas formas de limitar el impacto del VIH en las 38 millones de personas que viven con el virus en todo el mundo, identificando nuevas soluciones terapéuticas que incluyan candidatos a fármacos antirretrovirales con mecanismos de acción únicos.